Séneca nació en el seno de una familia adinerada aunque él prefirió vivir con cierta humildad. De salud delicada por su condición de asmático. Fue condicionado durante toda su vida a esta enfermedad. Le hacía decidirse, ya con el uso de la razón, por el suicidio aunque siempre desistía de ello. Y lo hacía por miedo a que su padre no pudiera soportar la muerte de un hijo.
El estoico Séneca, quizás uno de los más grandes de su filosofía. Y quizás el más grande filósofo romano: A vivir hay que aprender toda la vida y, cosa que quizá te extrañe más, toda la vida hay que aprender a morir.
Séneca fue filósofo, orador, político y escritor romano. A parte de senador en 4 gobiernos romanos y tutor y consejero de Nerón. Fue un gran orador. Impulsor del estoicismo cuyas medidas de austeridad pudo aplicar en el poder con la reducción de los impuestos indirectos y la persecución de la corrupción.
Se le achaca sin embargo que en ocasiones no supo vivir según sus ideales. Que mostró actos de cobardía. Como en la omisión de actuaciones criminales de Nerón. El jamás desmintió cierta cobardía sino que lo admitió. Y lo justificó en su cierta complicidad por su posición especial. Lamentaba no poder hacer más por el pueblo al perseguir dichas injusticias. A cambio trataba de otorgar otros valores o beneficios al pueblo romano, al que tenía en gran estima.
En su vida, Séneca sufrió un destierro a Córcega y varias condenas a muerte, por Claudio o Calígula. Principalmente por sus dotes de oratoria y su influencia que con ello ofrecía al senado y al pueblo romano.
Su final político llegó con el emperador Nerón. Su discípulo comenzó a codearse con personas contrarias al estoico. Eso le sentenció a dejar el gobierno. Entregó tras su renuncia su fortuna.
Parece ser que eso no fue suficiente por Nerón que quería ver muerto a su mentor. Trataron de envenenarlo pero su antídoto de prevención con la toma sistemática de veneno le favoreció. Salió ileso aunque entendió que prefería poner fin a su vida antes de que ser tomado por aquellas manos que oprimían al pueblo.
De nuevo trató de envenenarse pero no lo consiguió. Se permitió una nueva oportunidad cortándose las venas pero parece ser que tampoco fue suficiente para terminar con su vida por lo que finalmente se fue a unos baños calientes para asfixiarse por su asma.
Fue un final trágico para un gran personaje de la historia, que dejó huella por su sentido de sobre la felicidad y la brevedad de la vida. Séneca vivió y disfrutó del estoicismo.
Quiero terminar el artículo con un interesante resumen que hace Manuel Bellido en su blog:
“Séneca no es solamente el más grande de los filósofos latinos, es también uno de los más leídos porque su pensamiento es universal, para los hombres y las mujeres de todos los tiempos hasta expresar en modo claro los problemas, las angustias y las incertezas del mundo contemporáneo. Su filosofía no es abstracta ni teórica, sino que se desarrolla como una ciencia de vida, como una escuela de sabiduría para ayudar al ser humano a establecer su equilibrio y conseguir su felicidad. Su filosofía es un penetrante análisis de la psique humana de la que se puede extraer una auténtica cura de los males del alma.”